¿Sabías que se estima que un 60% aproximadamente de las mujeres sufrirá alguna alteración relacionada con el suelo pélvico a lo largo de su vida? Pero ¿qué es? ¿Cuáles son las posibles causas de su debilitación? A continuación, resolvemos estas dudas y muchas más sobre esta estructura tan importante del cuerpo humano.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico es un conjunto de músculos y tejido conectivo que envuelve la parte inferior de la cavidad abdominal y cuya función principal es sostener los órganos pélvicos del interior de la pelvis (la vejiga, la uretra, el recto, el útero, la vagina, la próstata y los testículos). El suelo pélvico trabaja juntamente con la musculatura abdominal y el diafragma torácico.
Todo este conjunto de músculos y tejidos es tratado por la disciplina terapéutica conocida como fisioterapia ginecológica u obstétrica.
¿Cuáles son las posibles causas de la debilitación del suelo pélvico?
El suelo pélvico puede verse afectado por el embarazo o el parto, aunque también por otras causas como la obesidad, el estreñimiento crónico, el sedentarismo o la práctica deportes de alto impacto.
¿Cuáles son los síntomas de un suelo pélvico débil?
Algunos de los síntomas del suelo pélvico debilitado son: dificultad para comenzar a orinar o vaciar la vejiga por completo, pérdidas de orina al reírse o toser, necesidad frecuente de orinar, etc. En los casos más graves se puede dar incontinencia fecal y prolapso uterino, es decir, descenso del útero hacia el exterior de la vagina.
¿Cómo puedo fortalecer el suelo pélvico?
Si tienes el suelo pélvico debilitado deberás ponerte en manos de fisioterapeutas especializados en esta musculatura. Algunos de los ejercicios que pueden recomendarte para restaurar el tono del suelo pélvico son los abdominales hipopresivos o los ejercicios de Kegel.
¿Afectan las disfunciones del suelo pélvico a la fertilidad?
Actualmente, no hay evidencia científica que afirme que las disfunciones del suelo pélvico sean una causa de infertilidad. Sin embargo, estas disfunciones pueden estar asociadas a dificultades de la función sexual, provocando que sea indirectamente más difícil concebir de forma natural, por ejemplo, por el dolor en las relaciones sexuales. Además, las disfunciones del suelo pélvico también se relacionan con el síndrome de ovarios poliquísticos o la endometriosis, pero suele ser un síntoma de estas patologías en lugar de la causa en sí misma.
¿Estás embarazada?
En caso afirmativo, desde Barcelona IVF recomendamos empezar a trabajar el suelo pélvico con un especialista para prevenir futuras disfunciones provocadas por el embarazo o el parto.
¿Y después del parto?
Las semanas posteriores a la llegada del bebé, se aconseja evitar hace grandes esfuerzos y valorar la musculatura abdominal y el suelo pélvico con un especialista antes de realizar actividad física.