La calidad de los óvulos juega un papel fundamental en la infertilidad femenina y la posibilidad de conseguir el embarazo. Una dotación cromosómica adecuada y la ausencia de alteraciones genéticas son factores esenciales para la calidad ovocitaria, pero ¿cuáles son las principales causas de una baja calidad de los gametos femeninos? ¿Cómo podemos mejorarla?
¿Cuáles son las posibles causas de la mala calidad ovocitaria?
El principal factor que produce el descenso de la calidad de los óvulos es la edad de la mujer a medida que avanza el tiempo y, especialmente, a partir de los 35 años. Sin embargo, existen otros posibles motivos: obesidad, hábitos poco saludables, patologías como la endometriosis o el síndrome de ovarios poliquísticos (SOP) o la administración de tratamientos oncológicos.
¿Cómo se evalúa la calidad de los ovocitos?
Muchas veces se confunden las mediciones de la reserva ovárica como, por ejemplo, la evaluación de los niveles de FSH o de la hormona antimülleriana, con la valoración de la calidad de los ovocitos. Es importante distinguir que la reserva ovárica es la cantidad de óvulos disponibles y no comprende la calidad de estos. Es decir, una baja reserva ovárica no implica necesariamente una baja calidad ovocitaria. No obstante, la edad es un factor clave en ambos aspectos, ya que a medida que envejecemos, los gametos femeninos van disminuyendo su cantidad y, además, acumulan mutaciones en su ADN que pueden repercutir al desarrollo embrionario, o sea, disminuyen su calidad. Dicho esto, la realidad es que conocer la calidad de los óvulos es muy complejo y se considera que el mejor modo de comprobarlo es a través de un ciclo de FIV . Una vez extraídos los óvulos, se analizan en el laboratorio teniendo en cuenta sus características morfológicas y su citoplasma.
Consejos para mejorar la calidad de los óvulos
Si bien es cierto que no existe ningún tratamiento mágico, la ciencia ha evidenciado que los hábitos de vida influyen en la calidad de los ovocitos y, en consecuencia, en el proceso reproductivo. Por esta razón, daremos 3 consejos para mejorar la calidad de las células sexuales femeninas.
- Consume alimentos ricos en vitamina E (también conocida como tocoferol o alfa-tocoferol). Esta vitamina es conocida por su efecto antioxidante. Se puede encontrar en alimentos como el aceite de girasol, el aceite de oliva, las avellanas o las almendras. Es importante no superar la cantidad recomendada diaria de 11 mg por día en mujeres adultas, según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
- Practica actividad física moderada. El deporte tiene múltiples beneficios, entre ellos el control de peso, un factor determinante para la calidad ovocitaria.
- Deja el tabaco: se ha observado que las mujeres fumadoras tienen óvulos de peor calidad, por lo que si quieres mejorar su calidad quizás sea un buen momento para plantear acabar con este hábito.