La tasa de gestación múltiple se ha incrementado notablemente a nivel mundial en las últimas décadas debido sobre todo al aumento de pacientes que recurren a los tratamientos de reproducción asistida para poder cumplir su sueño de ser padres.
Embarazo de riesgo
Sin embargo, un embarazo múltiple está considerado por los profesionales como un embarazo de riesgo ya que conlleva un incremento de las probabilidades de parto prematuro, placenta previa, preeclampsia, diabetes gestacional, bajo peso al nacer, retraso de crecimiento intrauterino y mortalidad perinatal entre otras complicaciones durante la gestación y el parto.
Por ello últimamente, para asegurar el bienestar de la madre y el futuro bebé, las diferentes sociedades médicas recomiendan encarecidamente intentar disminuir estas tasas de gestación múltiple sin menguar las probabilidades de embarazo adaptando los protocolos de reproducción asistida a conseguir un embarazo único y saludable.
Embarazo múltiple por inseminación artificial
En una inseminación artificial, la mujer recibe un tratamiento hormonal para estimular el crecimiento de un número reducido de folículos ováricos. A lo largo del ciclo, irá realizando controles ecográficos y analíticas hormonales que permitirán saber si se desarrollan uno o más folículo en el ovario. Para evitar un embarazo múltiple por inseminación artificial es importante seguir las recomendaciones del ginecólogo que realiza el seguimiento que valorará el caso de manera individualizada.
Embarazo múltiple por fecundación in vitro
Para evitar una gestación múltiple en un tratamiento de reproducción se ha establecido como norma general en muchas clínicas de reproducción asistida el SET (single embryo transfer) o transferencia de un único embrión. Es importante pues seguir las recomendaciones del equipo médico, que valorará cada caso de forma individualizada y aconsejará a los pacientes según sus probabilidades de éxito y de gestación múltiple, ya que en tratamientos de ovodonación donde la calidad ovocitaria es mejor, las tasas de gestación múltiple en caso de transferencias de más de un embrión son mucho más altas que en ciclos con ovocitos de la paciente.
Es importante remarcar que, con la transferencia de un embrión, baja la tasa de embarazo por transferencia, pero no la tasa general de todo el ciclo. Los embriones aptos y capaces de dar lugar a una gestación se pueden vitrificar y transferir más adelante. Así la tasa acumulada por ciclo será la misma, tanto si se transfieren los embriones de uno en uno o en pares. Además, la mejora de las condiciones de cultivo y las nuevas tecnologías permiten seleccionar mejor para la transferencia el embrión que cuenta con la mayor capacidad de implantación.
Así pues, hoy en día el éxito de los tratamientos de fertilidad se mide en conseguir un niño sano en casa con las mayores garantías también para la salud de la mamá.