En la actualidad, un método eficaz para criopreservar material biológico es la vitrificación.
¿Qué es la vitrificación?
Este método consiste en deshidratar la célula que queremos criopreservar de una manera muy rápida para evitar daño celular. Para conseguir la deshidratación "ultra rápida" necesitamos altas concentraciones de crioprotector, que es el elemento que substituirá el agua del interior de la célula y que no cristaliza a muy bajas temperaturas ( - 196ºC). Dadas las altas concentraciones de crioprotector, la vitrificación (el proceso de poner en contacto las células con el crioprotector) tiene que ser muy rápido, pues exponer a las células a estas altas concentraciones puede ser tóxico para las mismas. Por ello, cuando estamos hablando de ser rápidos, estamos hablando de unos pocos segundos para realizar el último paso que es el que realmente “congela” la célula.
La técnica
A nivel de utilización en un laboratorio, es necesario aprender a vitrificar de forma rutinaria. Dada la velocidad a la que debe realizarse el proceso, todas las personas que tienen que realizar la técnica sufrirán una curva de aprendizaje necesaria para asegurar los buenos resultados del proceso.
Aplicación clínica
En cuanto a su aplicación clínica, es muy diversa. Es posible vitrificar óvulos de pacientes o embriones supernumerarios en diferentes estadios (D+2/D+3/ BLASTOCISTOS) procedentes de un programa de fecundación in vitro .
Actualmente, la vitrificación ha sustituido prácticamente en todos los laboratorios a la curva lenta de congelación embrionaria que presentaba en general unos buenos resultados pero poco estables. Con la vitrificación embrionaria, la tasa de supervivencia embrionaria es superior al 95 %. En cuanto a los óvulos y blastocitos, está claramente demostrada la ineficacia de la curva lenta para estos tipos celulares y más que demostrada la técnica de la vitrificación para los mismos.
Vitrificación: Buenos resultados
Los buenos resultados del método de vitrificación dan mucho juego al laboratorio ya que permiten vitrificar óvulos si la paciente ha tenido una alta respuesta a la estimulación o bien criopreservar embriones en estadio de D+2/D+3 tras la transferencia embrionaria o dejar evolucionar los embriones al estadio de blastocisto para seleccionar los embriones evolutivos y posteriormente vitrificarlos con unos resultados post desvitrificación excelentes.
Otras utilizaciones
También en aquellas pacientes con una baja respuesta a la estimulación, permite la acumulación de óvulos o embriones para poder realizar técnicas de diagnóstico preimplantacional si lo requiere el caso con una mayor probabilidad de éxito al disponer de mayor número de células para analizar.
En resumen, considerando los grandes avances que han marcado un hito en las técnicas de reproducción asistida, creemos que la vitrificación merece un lugar destacado entre ellas pues ha facilitado la versatilidad en el laboratorio para criopreservar a cada paciente el material celular en el estadio más adecuado y permitir aumentar las tasas de éxito de cada grupo de paciente.