El embarazo supone un cambio extraordinario en el cuerpo de una mujer. En el momento en que el útero recibe al embrión se establece una comunicación a nivel molecular entre ellos que también llegará a otros órganos del cuerpo para poder adaptar el cuerpo de la mujer y su fisiología a las necesidades de un feto en crecimiento.
Manchado de implantación
En el momento de la implantación, el embrión invade el endometrio y encuentra su lugar en el útero donde empieza a crecer y a formar también la placenta. Allí reorganiza los pequeños vasos sanguíneos a su alrededor para poder recibir alimento y oxígeno de la madre. Las pequeñas roturas de vasos pueden ocasionar un leve sangrado conocido como sangrado o manchado de implantación.
Cambios hormonales y primeros síntomas de embarazo
Esta comunicación del embrión con el endometrio desencadena una cascada de cambios hormonales en el cuerpo de la mujer. Estos se manifiestan en una serie de síntomas y molestias que nos pueden indicar que la mujer está embarazada. El signo más claro de embarazo es el retraso o ausencia de menstruación. Pero antes de éste pueden aparecer otros síntomas más sutiles. Uno de más comunes es un flujo vaginal denso y blanquecino. Otro síntoma común en las primeras semanas del embarazo son los cólicos, mareos y dolores abdominales. Estos a veces se pueden confundir con las molestias que algunas mujeres sufren días antes de tener la regla.
Más adelante, la mujer puede notar sus senos más sensibles de lo normal e incluso un poco inflamados. Esto es debido a la estimulación de las glándulas mamarias para prepararlas para una futura lactancia materna. A su vez, las aureolas de los senos se oscurecen y los pezones pueden llegar a ser más sensibles y rígidos, siendo a veces incómodos al roce. También es normal que al inicio del embarazo la mujer se sienta más cansada. Este cansancio, e incluso somnolencia, irá en aumento a medida que pasen las semanas durante el primer trimestre. Durante este tiempo, el cuerpo está adaptándose aún a proporcionar toda la energía necesaria para el desarrollo del feto.
Síntomas comunes del primer trimestre de embarazo como la necesidad constante de orinar y las náuseas matutinas pueden aparecer ya en las primeras semanas de embarazo.
Síntomas en un tratamiento de reproducción in vitro
La estimulación ovárica durante un tratamiento de reproducción in vitro, así como la preparación endometrial son tratamientos hormonales que también nos pueden ocasionar síntomas parecidos a los primeros síntomas del embarazo como los cólicos, mareos o molestias abdominales. Además, la ansiedad durante esos días de espera puede también incrementar la sensación de mareo y malestar.
Es importante remarcar que el hecho de no sentir ni notar ningún síntoma o molestia los primeros días no es señal de ausencia de embarazo. Una mujer puede estar embarazada y no notar absolutamente nada ya que cada mujer es diferente y su cuerpo, único. No podemos confirmar ni descartar la gestación hasta no haber realizado una prueba de embarazo, ya sea en orina o en sangre, mucho más específica.