Durante el proceso de estimulación ovárica en las técnicas de reproducción asistida como la fertilización in vitro (FIV) o la inseminación artificial (IA), es fundamental controlar el tamaño de los folículos ováricos, ya que puede influir en el éxito del tratamiento de fertilidad.
En este blog, exploraremos la importancia del tamaño de los folículos, así como la monitorización que debe seguirse durante todo el proceso de estimulación ovárica.
¿Qué son los folículos?
Un folículo ovárico es una estructura pequeña, llena de líquido folicular, ubicada en el ovario y que contiene un óvulo inmaduro en su interior. Los ovarios albergan una gran cantidad de estos folículos.
Durante el ciclo menstrual de la mujer, un óvulo se desarrolla y madura dentro de uno de estos folículos. Cuando el óvulo madura completamente, el folículo se rompe, liberando el óvulo para que pueda ser fecundado.
Monitorización de los folículos durante la reproducción asistida
Los folículos ováricos van creciendo gradualmente bajo la influencia de las hormonas administradas durante la estimulación ovárica. A lo largo del proceso, es fundamental realizar ecografías periódicas para medir su tamaño y monitorizar su crecimiento, ya que esto determinará el momento óptimo para la extracción de los ovocitos. De hecho, un crecimiento adecuado del folículo es indicativo de una respuesta positiva al tratamiento.
La monitorización de los folículos hasta su maduración está marcada por diferentes etapas:
La monitorización de los folículos hasta su maduración está marcada por diferentes etapas:
Estudio de fertilidad
En los primeros días del ciclo, se debe evaluar la reserva ovárica realizando un estudio ginecológico de fertilidad mediante pruebas hormonales (hormona antimulleriana (AMH), hormona luteinizante (LH), hormona foliculoestimulante (FSH), etc.) y ecografía vaginal, para determinar el tamaño y la cantidad de folículos antrales. Una reserva ovárica adecuada es importante para que la respuesta a la estimulación sea óptima y garantizar el éxito del tratamiento de fertilidad. Se considera una reserva ovárica adecuada o normal si el recuento de folículos es de 6 a 15, baja si es inferior a 6 y alta si es superior a 20 En esta fase, el tamaño folicular es de 2 a 10 mm.
Estudio de farmacogenética
La farmacogenética permite estudiar cómo la variación genética puede influir en la respuesta de una persona a la medicación hormonal durante la estimulación ovárica. Esto puede ser importante para entender situaciones como el fallo ovárico prematuro y personalizar el tratamiento.
Estimulación ovárica y maduración de los folículos
Cuando se administra la medicación hormonal, se estimula el crecimiento de prácticamente todos los folículos antrales a diferentes ritmos. Cuando alcanzan un tamaño próximo a los 18 mm, se administra la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG) para que se produzca la ovulación.
La recolección de óvulos se programa aproximadamente 36 horas después de la administración de esta hormona. El objetivo del tratamiento es recolectar la mayor cantidad posible de óvulos maduros que luego puedan ser fecundados por los espermatozoides.
Punción ovárica
Cuando se trata de FIV, una vez que los folículos alcanzan un tamaño óptimo, se programa la punción ovárica para extraer los ovocitos. Hay que tener en cuenta que no todos los folículos contienen ovocitos maduros, ni todos los ovocitos tienen la misma calidad.
En algunos casos, puede ocurrir el síndrome de folículo vacío, donde no se obtienen ovocitos durante la punción ovárica a pesar de un crecimiento de folículos y niveles de estradiol adecuados. La mayor parte de veces se debe a errores en la administración de los medicamentos, pero aun así hay algunos casos de ausencia de madurez y producción de óvulos maduros en el ovario.
Control Ginecológico Rutinario
Después de la estimulación ovárica y la extracción de ovocitos, se debe realizar un control ginecológico rutinario para evaluar la respuesta al tratamiento y proporcionar orientación sobre los próximos pasos del proceso de reproducción asistida.
Por tanto, el tamaño y la calidad de los folículos ováricos pueden influir en la calidad de los ovocitos obtenidos durante la punción ovárica. Además, la monitorización continua del proceso y la evaluación completa de la reserva ovárica son fundamentales para garantizar una respuesta adecuada al tratamiento y el éxito del tratamiento de fertilidad.
