Los niños ya no vienen de París sino de España, que es un país referente en reproducción asistida, siendo Barcelona, además, una ciudad considerada por todos como la capital europea de la donación de óvulos . Uno de cada tres ciclos de donación de los que se realiza en Europa, se hace en nuestra ciudad.
Reproducción asistida en Europa
Con estos datos en la mano uno diría que en el resto de Europa no se hacen tratamientos, pero esto no es así. En realidad se hacen, y muchos, aunque con una serie de limitaciones en la mayoría de los países que hacen que muchas parejas tomen al decisión de viajar para conseguir el sueño de ser padres.
Las restricciones
Existen países con grandes limitaciones como Alemania, donde está prohibido congelar embriones, la donación de óvulos y el diagnóstico genético preimplantacional se autoriza en poquísimos casos. Otros países de influencia germánica como Suiza y Austria son también muy restrictivos estando prohibido cualquier tipo de donación o manipulación embrionaria. Hay países en los que poco a poco se amplían las posibilidades como en Italia, donde a pesar de la restricción que también existe para congelar embriones o hacer diagnóstico genético, se acaba de autorizar la donación de óvulos.
En otros países las limitaciones tiene en cuenta la edad, la orientación sexual o el estado civil, como en Francia, donde las mujeres sin pareja o las parejas de lesbianas no pueden someterse a tratamientos.
También es sorprendente que en algunos países nórdicos, tradicionales ejemplos de modernidad social, sea legal la donación de semen pero ilegal la de óvulos. Aunque esto puede cambiar en breve, ya que por ejemplo en estos momentos existe un gran debate en Noruega sobre si se debe legalizar la donación de óvulos.
Listas de espera
Finalmente están los países con regulaciones abiertas y modernas como Reino Unido, Países Bajos o Bélgica, dónde en ocasiones el problema está relacionado bien con las listas de espera para acceder a determinados tratamientos como la donación de óvulos como en Reino Unido o bien con las restricciones para conseguir una donante, como en Holanda, donde la paciente debe buscar la donante quien además ha de cumplir unas condiciones muy determinadas.
Parecería que los pacientes vienen a España sólo para hacer lo que no pueden en sus países, pero no es así. Además de tener un marco legal moderno y liberal, nuestro país está considerado como el segundo mejor del mundo para realizarse un tratamiento de reproducción asistida, tanto por la calidad del servicio como por los resultados, lo que hace que cada vez más pacientes de toda Europa vengan a tratarse independientemente de las restricciones que tienen en su países.