¿Qué se puede encontrar en una biopsia de endometrio?
La biopsia de endometrio es un procedimiento ginecológico que consiste en extraer una pequeña muestra de tejido endometrial para su posterior análisis. Se utiliza para evaluar la salud del tejido, identificar posibles alteraciones y ayudar en el diagnóstico clínico.
¿Para qué se realiza?
Los principales usos de la biopsia de endometrio son:
- Evaluación de la receptividad endometrial: con el objetivo de determinar el periodo óptimo en el que el endometrio se encuentra preparado para la implantación del embrión, lo que se conoce como ventana de implantación.
- Evaluación del ciclo menstrual y la respuesta hormonal.
- Detección de infecciones en el útero: la presencia de infecciones persistentes en el útero puede producir endometritis, es decir, inflamación o irritación del tejido. Además, la evaluación del microbioma endometrial es cada vez más importante para detectar desequilibrios que puedan afectar tanto a la implantación como al mantenimiento del embarazo.
- Diagnóstico de trastornos hormonales: que influyen en el desarrollo y la maduración del endometrio.
- Detección de atrofia endometrial: un endometrio excesivamente delgado puede dificultar la implantación.
- Identificación de lesiones: Se utiliza para detectar la presencia de pólipos, fibromas y lesiones premalignas de hiperplasia o cáncer.
¿Cómo se realiza la biopsia de endometrio?
El procedimiento se realiza de forma ambulatoria, generalmente en la consulta ginecológica. Se introduce un catéter fino a través del cuello uterino hasta alcanzar el endometrio. A continuación se extrae una muestra representativa del tejido mediante succión o raspado, que se envía al laboratorio para su análisis histológico y microbiológico.
Aunque su realización puede causar molestias leves o cólicos similares a la menstruación, es un procedimiento seguro que permite a la mayoría de las pacientes retomar sus actividades sin problema.
¿Cuándo está indicada una biopsia de endometrio?
Las indicaciones clínicas para realizar una biopsia de endometrio incluyen:
- Fallos repetidos de implantación en ciclos de FIV.
- Sangrados uterinos anormales o irregulares: para descartar patologías como la hiperplasia o el cáncer endometrial.
- Sospecha de endometritis crónica: cuando hay evidencia clínica de infección persistente que podría estar afectando la calidad del endometrio.
La biopsia de endometrio es la base para la realización de otras pruebas especializadas como:
- Test ERA (Endometrial Receptivity Analysis): que a través del análisis de la expresión génica permite determinar la ventana de implantación óptima.
- Test EMMA (Endometrial Microbiome Metagenomic Analysis): que evalúa el microbioma endometrial, analizando el equilibrio bacteriano del tejido.
- Test ALICE (Analysis of Infectious Chronic Endometritis): para la detección de infecciones crónicas.